martes, 16 de agosto de 2016

Maternidad, ser o no ser...




Tengo 39 años recién cumplidos, siempre he pensado que sería madre alguna vez.
No es ni mucho menos que no haya tenido parejas, todo lo contrario, pero…Mi actual pareja no quiere tener hijos, y no hay más que discutir… yo no puedo obligar a nadie a adoptar un compromiso que no quiere.
Y en este punto de inflexión estoy anclada, estoy en el descuento en cuanto a fertilidad se refiere… ¿debo conformarme y seguir como si nada?, esto no tiene marcha atrás, es una decisión irreversible.
Es gracioso, pero no hace mucho leí como una mujer en mi situación tuvo que tomar la decisión y por amor decidió no tener hijos… Años más tarde cuando ella ya no tenía solución él se marchó con una mujer que sí podía tenerlos, más joven, y formaron una feliz familia… y ella, la que se sacrificó por amor se quedó sola, sin nada salvo sí misma, como un trasto viejo desechado. Porque él quería hijos propios, porque ni siquiera se planteó el adoptar juntos, porque al fin y al cabo él no dejaba de ser un egoísta impresentable cuya única prioridad en la vida era su pene. No deja de tener cierta gracia determinista que yo me encontrase este testimonio, ¿será algo premonitorio?, no sé, no creo mucho en estas cosas pero, quizás, quién sabe.
Yo no quiero ser un trasto viejo, no quiero que dentro de cinco años me dejen abandonada en un basurero por ser yerma, me niego.

Hay que ver qué cosas nos preocupan a las casi cuarentonas, al fin y al cabo también tenemos parte biológica y nos preocupa. Supongo que se me pasará la preocupación, o no, o quizás sea mi carga en los próximos cinco años. Yo que sé, o quizás es que aún todo tiene que cambiar.