lunes, 19 de julio de 2010

LA PERSPECTIVA DEL TIEMPO

Como algo aparentemente desapercibido el tiempo pasa, un día miras el calendario y ha pasado más de un año desde tu último gran fracaso sentimental. Miras fotos, recuerdas cosas y ya no sientes nada, sólo indiferencia, bueno y por qué no decirlo, en esta ocasión una gran repugnancia hacia todo lo que desembocó.
Yo, como muchas mujeres, me siento “fracasada” cuando algo no va bien a nivel pareja, independientemente de que yo sólo tenga parte de la responsabilidad. Y hace más de un año me sentí tremendamente fracasada. Yo no soy una persona que se agarre a un clavo ardiendo, cuando estoy con alguien en realidad quiero estarlo, pero esa última vez me lié sin querer. Puede que suene tópico, pero así fue, y me dejé arrastrar por una situación que auguraba claramente la crónica de una “muerte” anunciada.
En el “arrastre” perdí mucho: algún falso amigo, tiempo y lo peor de todo mi dignidad pública. Es lo que tiene no medir bien con qué tipo de personaje se sale, un día una se encuentra humillada públicamente e insultada vilmente por alguien que se supone que en alguna milésima de segundo de su miserable existencia me quiso. No obstante, si hay amigos de verdad ellos permanecen a tu lado, la gente que te conoce y te trata habitualmente no necesita de ningún tipo de explicación, simplemente permanecen contigo. No voy a dedicar una línea a aquellos que “perdí”, pues simplemente sucedió para que yo ganase.
Hoy, a una semana de ser más vieja, puedo decir con una pasmosa felicidad que sé que no me he equivocado en ninguna de las decisiones tomadas. En dos días me libero del otro “lastre” que es la oposición y aún me quedarán vacaciones para disfrutarlas con todos aquellos que me demuestran que me quieren y aprecian. No sé si alguno leerá por aquí, pero gracias a todos por estar ahí en los momentos duros, y sobre todo por demostrarme que me valoráis como persona.

10 comentarios:

  1. Hola.
    Cuando perdemos a alguien puede ser algo muy doloroso, pero en casos como los que cuentas, se pierde para ganar por otro lado. Y de todas las pérdidas se aprende, para bien o para mal.
    Un beso, y mucha suerte con el examen que te queda.

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  2. Gracias Pablo :)
    La gente como nosotros sólo pierde para ganar ;). Un beso.

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  3. Joder, la verdad es que lo siento, porque bueno, está guay que empieces a bloggear, tron, pero este tema del quererse, me mata. No puedo comentar nada coherente sobre esto sin extenderme con paranoias y estudios míos que no vienen a cuento.
    ¿Perder para ganar? Evolucionamos constantemente, es cierto. Pero también evolucionas cuando, sencillamente, perdemos. Depende de cómo se mire.

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  4. Bueno, más que el tema del quererse, es un gracias a todos mis amigos y una reflexión sobre aquellas cosas que nos hacen sentirnos fracasados, en esta ocasión era una relación, pero en otras es el efecto de "indefensión aprendida" (cuando crees que no sirves para algo). Es más un rollo de autoestima que de amor, las cosas como son. La lectura debe de hacerse siempre en positivo, aferrarse a lo que pudo ser y no es no sirve de nada, si algo ha fallado es porque no era para tí.

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  5. Pues no pienso así. Si algo ha fallado puede ser porque no es para ti o porque algo no has hecho bien. ¿Aferrarse a algo? Hablas de blanco y negro, también hay grises.
    Las cosas puedes no tenerlas porque no has hecho lo suficiente, has pujado a la baja o has metido la pata. Tampoco hay que insistir por insistir, eso te hace pesado y es perjudicial. En ese sentido, por ejemplo, yo siempre estoy en la delgada línea que separa lo pesado de lo ambicioso. Y, ejem, siempre caigo hacia el lado que no es, jajaja...

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  6. Estimado Dr. Fray:
    Siempre metemos la pata de un modo u otro, nunca me lavo las manos en cuanto a responsabilidades. Mi entrada de blog hablaba de una ruptura muy concreta. Y claro que existen los grises, pero al final las cosas pasan por algo o por alguien…
    Yo normalmente soy de esforzarme...y quizás a veces peco de pesada, no lo sé...justo antes de este de la entrada tuve un affaire que perdí de “formalizar” por culpa de no ser "pesada" o “insistente”, de hecho así me lo declaró:"Tía, pasas mucho de mí, llevo un año esperando", y francamente, él me encantaba porque tenía todas esas cosas que te puse en facebook que buscamos en un hombre...mea culpa. Cada uno sois un mundo, lo que a ti te puede parecer adorable a otro puede parecerle terrible, y claro no lleváis libro de instrucciones. Y en cuanto “ambicioso” no entendí muy bien a qué te refieres.
    Las relaciones humanas son complejas de por sí, pero en el caso de las relaciones sentimentales las cosas se embrollan mucho más, porque los sentimientos no pueden racionalizarse… el deseo es indomable.

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  7. ¿Ves cómo al final todo tiene que ver con el quererse? Y decías tú que no.
    Es que soy muy obtuso, mujer.
    ¿Ambicioso? Pues que cuando quieres algo, insistes mucho. Y te acercas a la pesadez.

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  8. Queridísimo Dr. Fray:
    El deseo y el quererse ya son dos cosas de elevado nivel...si se fusionan saltan chispas incontroladas y uno de los dos tiende a huír. Sólo había considerado el deseo para este punto y la entrada de facebook.
    Respecto a la "ambición", supongo que es siempre necesario insistir...échale la culpa al deseo ;)
    Al final acabaremos hablando de amor...jajaja.

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  9. Permíteme dudarlo. Esos temas ni los rozo, porque me producen urticaria.
    ¡Vade retro, sentimental!

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  10. Pero Dr. Fray, los hombres soléis emplear el término "amor" con una extrema ligereza, sé que es una de esas generalizaciones mías que tanto odias, pero es verdad, os sigo de cerca :P

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