martes, 16 de noviembre de 2010

El paso implacable del tiempo y los cuentos


Hace mucho tiempo que soy mayor, no sé cómo sucedió. Un día, sin más, me encontré con una cuasi-señora en el espejo. ¿Cuándo las canas se han ido ocultando entre mis mechones?... y lo peor de todo, comienzan a marcarse mis signos de expresión en el rostro… Lara, tan expresiva, tan marcada. Y hay que admitirlo, el tiempo pasa, y ya he superado la barrera de la treintena, incluso hay una sección pornográfica: “mujeres de treinta”. Y el caso, es que yo no me veo tan mayor, quiero decir, que me veo mejor que hace diez años. Posiblemente esto responda a una autoestima exacerbada por mi parte, o no.
Con el tiempo, he pasado de ser rubia a “brunette”, de nuevo otro término utilizado en el erotismo moderno. Quizás, he seguido el camino inverso de mis congéneres, que para disimular los rayos de la luna en el cabello se tornan rubias. Sin embargo, yo voy al revés, y me veo cada vez más joven sin serlo. ¿Será quizás un complejo de Peter Pan femenino?, en todo caso lo prefiero al de Cenicienta… no quiero un hombre que me salve y me proteja, deseo un hombre que me ame.
Es curioso cómo Walt Disney ha participado de un modo involuntario en la acuñación de nuevos términos de patologías psicológicas, quién se lo iba a decir. Aunque no es nuevo que los cuentos recojan realidades, véase mi entrada Mi pequeña reflexión sobre Cenicienta. La diferencia ahora, es que el cuento ya no recoge las tradiciones centenarias centroeuropeas como hacían los cuentos de Perrault, actualmente, nuestros cuentos bautizan trastornos del comportamiento, los desvaríos de nuestra conducta.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Las mariposas...Los amantes mariposa.



Posiblemente Lacombe sea uno de mis ilustradores favoritos, lo descubrí en un taller de fomento a la lectura del sindicato... luego, alguien que ya no está en mi vida me regaló el cuento ilustrado que tanto me había fascinado en aquel taller. "Los amantes mariposa", uno de mis cuentos favoritos y que recoge una antigua leyenda china:
La historia se ubica en la dinastía oriental Jin.
Una joven,Zhu, se disfraza de hombre, viajando a Hangzhou para estudiar. Durante su viaje, se encuentra con Liang Shanbo, un compañero de escuela de la misma provincia. Estudian juntos por tres años, durante los cuales su relación se estrecha, pero en la que él nunca se percata que es una mujer. Cuando se separan, Zhu se ofrece para arreglar que Liang se case con su ficticia hermana de 16 años.
Cuando Liang viaja a casa de Zhu, descubre que en realidad es una mujer. Aunque ya están enamorados el uno del otro a estas alturas, Zhu está comprometida con Ma Wencai, un hombre con quienes sus padres han concertado que se case.
Deprimido, Liang muere. En el día en que Zhu va a casarse con Ma, un remolino de viento impide que el cortejo nupcial escolte a Zhu más allá de la tumba de Liang. Ella deja la procesión para presentar sus respetos a Liang. La tumba de Liang se abre, y Zhu entra para reunirse con él. Y una pareja de mariposas surge de la tumba y se alejan volando.

domingo, 10 de octubre de 2010

Reflexiones personales sobre el matrimonio…




Yo a día de hoy no creo en la viabilidad de este contrato, las cosas como son, así que espero que algún día alguien me demuestre lo contrario. Y sí, es un contrato tal cual, no es un conjunto de proyectos de dos personas que se aman locamente, es algo más complejo. Habrá quien piense que qué puedo saber yo acerca del matrimonio, ya que no estoy casada… bueno disculpa, pero los curas llevan siglos hablando sobre el amor y casando a gente como tú, y nadie les ha dicho nada, así que yo me tomo las licencias que quiero en mi espacio de notas.
Volviendo al tema: matrimonio. Para los católicos, y para casi todos los españolitos es un sacramento (paso de haceros el examen si os sabéis todos los sacramentos), un gran paso hacia la vida “adulta” y casi una de las decisiones más importantes de vuestra vida, si le echáis un ojo al código civil entenderéis el porqué de mi afirmación. Dos personas que “voluntariamente” (es necesario entrecomillarlo, creerme) dan un paso en su relación de pareja ante la sociedad y ellos mismo. La variante de “pareja de hecho” no está del todo perfeccionada, supongo que con el tiempo las cosas mejoren.

Retomando el matrimonio, el contrato en sí alberga un conjunto de buenas intenciones que se ven abruptamente desestimadas a lo largo de la convivencia y en especial, en el proceso de divorcio (estaréis conmigo en que el matrimonio es el principal motivo de divorcio)… Aquí tengo yo cuatro anécdotas terribles en mi devenir profesional de la que sólo contaré una: un señor que estaba en pleno proceso de divorcio, a la hora de presentar gastos metía mensualmente la factura del burdel como gastos comunes del matrimonio… No es por ser mala, pero las “faltosadas” más sonadas que recuerdo son masculinas, será casualidad, por supuesto.

Y seguimos con el sacramento, se dice que los matrimonios “de antes”, supongo que ahí hacen alusión al “de antes de la democracia”, estaban más consolidados… Esto a mí no me queda claro, la gente solía casarse joven, muy joven en plena adolescencia, sin apenas conocerse “profundamente” (pilladlo en toda su intensidad), sin haber madurado y con unos roles muy marcados. A ver, no digo que no se quisiesen, pero no sé si sabían a lo que iban. Cuando se les legalizó el divorcio…bueno, los que evidentemente se habían equivocado aprovecharon y descarrilaron, y otros continuaron con su matrimonio porque habían acertado o porque estaban atados por la hipoteca (los bancos han unido a más parejas que el amor)…. Por esa regla, los matrimonios celebrados en la democracia tendrían que haber sido más duraderos… pues no, tampoco, a pesar de que la gente se casa más madura y supuestamente más informada, la cosa sigue fallando…

Y digo yo: ¿no tenemos claro lo que significa el contrato?. Un divorcio medio con acuerdo y sin llegar a juicio sale por unos 12.000 Euros. Si la cosa va a juicio el precio se dispara entre gastos de tramitación, tasación y procurador. Hay ahora mismo parejas que se separan y no se divorcian porque no pueden asumir el coste. Si encima hay niños ya la cosa se convierte en una odisea: los gastos de manutención… Y yo no dejo de preguntarme si la gente sabe lo que hay. ¿Somos conscientes de qué conlleva el matrimonio?, de verdad que lo planteo desde el respeto, creo que la gente no es del todo consciente (y hablo de la mayoría, no de las admirables excepciones que tengo la suerte de conocer). Es como aquellos que se plantean tener un hijo sin sopesar todas las consecuencias, que un niño es mucha responsabilidad, que no vienen con un pan debajo del brazo ¡caray!.
No sé, creo que seguimos sin madurar, ya veremos de aquí a siete años qué pasa.

lunes, 16 de agosto de 2010

Viajes, escapadas y demás actividades


Con la época estival las agencias y buscadores de la red disparan sus ofertas de última hora, pequeñas escapadas y destinos turísticos a precio “ganga” que tratan de tentar a los más rezagados o a aquellos que han dejado de vacaciones porque tocaba. Y son ofertas tentadoras a muy buen precio pero con una pega… Están pensadas para dos. Como las hipotecas de los bancos que están calculadas para dos sueldos (y no precisamente de mileuristas).
¿Qué demonios pasa?, ¿está penado ser soltero y no tener pareja?... La cosa en sí a mí me molesta, porque vamos a ver, si me quiero dar una escapadita…¿necesariamente tengo que echarme un “chati”?. Además son ofertas de última hora, no sé, tampoco me da mucho tiempo de maniobra para engatusar a alguno… ¿Es que los solteros sin pareja no tenemos derecho a viajar?. Son cosas francamente molestas… tan sólo hay ofertas de cruceros para “singles”… es decir, un viaje carísimo en un barco lleno de tíos pervertidos y con cara de co.. y a ser posible supertristes y horrorosos… y eso sin contar con la edad avanzada… Yo no estoy dispuesta a pagar nada por semejante tortura.
Y digo yo, ¿por qué nadie más protesta?... En estas agencias deberían entender que llevarme a un amigo, aunque le de cierto derecho a roce es un “problemón”. Porque los hombres, aunque a simple vista parece que no son muy complicados, enseguida se obsesionan con la idea de que quieres un maldito compromiso, y lo que es peor que si pasas de los treinta años o te acercas comienzan con la payasada de lo del “reloj biológico”, sin pensar que si quisieras un hijo elegirías mejor el 50% de su carga genética… Y miras tu agenda de amigos y…acabas mirando la de amigas, pero claro, casi todas están emparejadas, y vuelves a mirar la de amigos y… decides que mañana es un buen día para destinar el dinero de la “escapada” en unas sandalias divinas que has visto en esa tienda tan cara y que han rebajado un 70%.

jueves, 5 de agosto de 2010

Sentirse especial…

Todos queremos ser especiales, en el sentido de ser únicos para alguien o para un grupo de personas. Que nos aprecien por cómo somos, por lo que somos e incluso por lo que seremos. A veces, fantaseamos con ser especiales para un grupo de gente…los amigos, y esperamos ser especiales para una persona que nos atrae físicamente…
Pero como todo, esa parte “especial” necesita alimentarse día a día, y tu ego pierde volumen a la misma velocidad que pierde su idiosincrasia.
La mayoría de la gente se cree increíblemente especial… y aciertan en su diagnóstico hasta cierto punto. Nuestros defectos al igual que nuestras virtudes, en el mismo grado de valor, nos hacen únicos e irrepetibles, por lo que todos somos “seres únicos”. Una especie de serie limitada a uno sólo… a pesar de la duplicación genética como el de la oveja Dolly.
Debo confesar que yo también soy única e irrepetible, para bien y para mal, y que deseo ser especial para mis amigos y seres con autorización a fricción… y a veces es mucho pedir… porque pido demasiado.

domingo, 1 de agosto de 2010

REVISANDO A LOS AMIG@S

Hace un par de años hubo un cisma entre mi grupo de amigos más directos, la causa: varios sucesos acumulados y la introducción de una “miembra” en el grupo. Yo había salido de una relación de cinco años y medio que hacía más de cuatro años pretendía concluir…era un año de oposiciones y mi abuelo falleció tras una dura enfermedad, vamos el cúmulo perfecto de cosas para que alguien me venga con “giliflauteces”… y como siempre, vinieron las tonterías. Digamos que a la “miembra” la había conocido en un curso del sindicato y coincidía que era de mi misma ciudad. La chica parecía buena gente y había estado los últimos tres años antes del curso viviendo en Gran Bretaña. Cuando volvió, según su versión, casi todos sus amigos y amigas habían salido de aquí para trabajar o se habían casado y cosas semejantes, así que me declaró que se sentía descolocada. Yo que soy de “Villagilipollas de Arriba”, tras haberla tratado unas cuantas veces, me pareció buena idea incluirla en mi grupo de amigos, e incorporarla paulatinamente en nuestras cenas e incursiones nocturnas…Craso error el mío.
Resultó, que llegaron las fechas estivales y organizaron un viaje veraniego a las costas gallegas, yo no podía cogerme vacaciones por motivos profesionales, pero la “miembra” se apuntó con mis amigos. Aquí empezó el follón…se ve que no querían que ella fuera… motivos a discutir, pero no se lo dijeron, y tuvieron lo que se conoce como “vacaciones tensas”. Y regresaron muy enfadados…CONMIGO…la lógica y el comportamiento huma se llevan mal, sí.
Claro, hay que entender que ella se apuntó y a ellos les daba apuro decirle que no, y como yo la había presentado al grupo… pues la culpa de la mierda del viaje era mía… y a todo esto yo levantando el país y sin enterarme…qué cosas.
Ya lo dice el refranero español: “Donde hay confianza da asco” y la cosa empezaba a heder. Tardaron casi una semana en contarme lo del mal rollo tras algunas putadas varias hacia mi. De hecho una de las decisiones de los 4 magníficos de mis amigos fue la siguiente: “la avisamos que quedamos con un margen de 10 minutos, o directamente le hacemos hueco”… Y los pillé, a mí los lloros y las mariconadas varias no me suelen hacer mucho efecto si te pillo en lo que se denomina “traición”… Dije lo que tenía que decir: “Creo que se os ha ido un poco de las manos. Llevamos muchos años juntos, y creo que lo mejor que podemos hacer es poner lo que se llama un “cordón sanitario” para evitar que esto pase a mayores. Yo me voy por mi lado y me llevo a la “miembra” y le digo que no os vuelva a molestar. A veces soy acojonantemente racional…o gilipollas, vete tú a saber. Y desde entonces, mantengo una relación cordial con ellos, nos vemos en los cumples y poco más, perdí la confianza… no soporto la traición.
La “miembra” resultó ser levemente esquizofrénica y tal, le pareció muy mal mi adquisición de pareja… el que me turra al timbre a las 7:10 de la mañana…¡madre mía!, si cada vez que lo pienso y analizo, veo que acumulo locos en mi vida. ¿Es posible que la gente esté tan loca?, o peor…quizás la loca soy yo y soy como un kamikaze que va en dirección contraria y que piensa que son los demás los que van mal…
Han pasado dos años, hay gente que he botado de mi vida, hay gente “nueva” y están mis “4 magníficos”…y aún no sé qué rumbo tomar… Ya no junto grupos de amigos, quedo por separado, e incluso a veces individualmente.

viernes, 23 de julio de 2010

LAS SERPIENTES Y YO

Hay veces que uno tiene presentimientos en determinados ocasiones que preludian lo que va a pasar… yo a ellos sumo sueños. Cuando algo va mal o va a ir mal las serpientes colman mis pensamientos oníricos, aparecen una y otra vez. Noto como las culebras rectan por mis piernas y sobre mis pies, y una gran boa comienza a rodearme. Siento como su piel roza la mía, como me rodea y aprieta hasta exprimir el aire que queda en mi cuerpo, y los latidos de mi corazón se disparan en un estado de ansiedad que acaba provocando que me despierte empapada en sudor y con un mal augurio sobre lo que va a pasar. Y eso me sucedió este año con la oposición, había algo extraño, y ocurrió. Sin duda no era mi año. Las serpientes ya se van, aunque me han dejado todo su veneno de recuerdo… nada que no tenga solución, ya que siempre guardo un antídoto de reserva. Afortunadamente, ellas no se acordaron de algunos buenos amigos, que sé que eran merecedores de laureles áureos en estas tensas pruebas.
Por desgracia sí se acordaron de mí, y espero que nunca más vuelvan a visitarme.

lunes, 19 de julio de 2010

LA PERSPECTIVA DEL TIEMPO

Como algo aparentemente desapercibido el tiempo pasa, un día miras el calendario y ha pasado más de un año desde tu último gran fracaso sentimental. Miras fotos, recuerdas cosas y ya no sientes nada, sólo indiferencia, bueno y por qué no decirlo, en esta ocasión una gran repugnancia hacia todo lo que desembocó.
Yo, como muchas mujeres, me siento “fracasada” cuando algo no va bien a nivel pareja, independientemente de que yo sólo tenga parte de la responsabilidad. Y hace más de un año me sentí tremendamente fracasada. Yo no soy una persona que se agarre a un clavo ardiendo, cuando estoy con alguien en realidad quiero estarlo, pero esa última vez me lié sin querer. Puede que suene tópico, pero así fue, y me dejé arrastrar por una situación que auguraba claramente la crónica de una “muerte” anunciada.
En el “arrastre” perdí mucho: algún falso amigo, tiempo y lo peor de todo mi dignidad pública. Es lo que tiene no medir bien con qué tipo de personaje se sale, un día una se encuentra humillada públicamente e insultada vilmente por alguien que se supone que en alguna milésima de segundo de su miserable existencia me quiso. No obstante, si hay amigos de verdad ellos permanecen a tu lado, la gente que te conoce y te trata habitualmente no necesita de ningún tipo de explicación, simplemente permanecen contigo. No voy a dedicar una línea a aquellos que “perdí”, pues simplemente sucedió para que yo ganase.
Hoy, a una semana de ser más vieja, puedo decir con una pasmosa felicidad que sé que no me he equivocado en ninguna de las decisiones tomadas. En dos días me libero del otro “lastre” que es la oposición y aún me quedarán vacaciones para disfrutarlas con todos aquellos que me demuestran que me quieren y aprecian. No sé si alguno leerá por aquí, pero gracias a todos por estar ahí en los momentos duros, y sobre todo por demostrarme que me valoráis como persona.

viernes, 16 de julio de 2010

Mi pequeña reflexión sobre Cenicienta en 2010

Alrededor de 1697, cuando Charles Perrault decidió recoger los cuentos orales de la tradición germánica, quizás no pensó que con ello no sólo preservaba interesantes relatos ancestrales, sino, que inmortalizaba las costumbres centroeuropeas del medievo. Las tradiciones y los ritos pervivieron en la vieja Europa a pesar de los siglos y la caída del sistema feudal... De este modo hoy sabemos todo el significado que adquiere en Cenicienta el zapato. Entre otras como la entrega de la mano de la esposa al esposo, pero sin duda una de las tradiciones que más me ha llamado la atención era la entregarle una zapatilla o zapato a la novia. De hecho, el término alemán que designa al marido es pantoffelheld, es decir, héroe de la zapatilla o zapato. Y claro, todos nos remitimos a esa imagen del príncipe buscando a la dueña del zapato entre todas las damas de su reino...hasta que el zapato ajustó en Cenicienta, a la cual desposaría... Y la iglesia sellaría en el rito a través de la siguiente fórmula nupcial: Matrimonium per vos contractum, ego, tamquam minister Dei, confirmo, ratifico et benefico in nomine Patris...

Retomando la idea del que yo cariñosamente denominaré el "Pantoffe"...ese idílico príncipe nos va a calzar para desposarnos y tutelarnos, (bueno afortunadamente ya no nos tutelan), otorgarnos un hogar, un fogaje que diríamos...Y así, pensando en expresiones populares, no me vino otra cosa a la cabeza que la expresión "calzarse a alguien".... ¿no tendrá algo que ver semejante giro?...Tendré que consultarlo con algún filólogo...Y esto no me hace más que remitirme a mis sueños, a esas visiones oníricas en las que vago descalza y libre por diversos lugares, observando y descubriendo...y a veces menudas cosas que encuentro detrás de una puerta... Y lo que es la imaginación, la carga sensorial y racional que conlleva en la actividad cerebral mientras descansamos en esa fase rem...una actividad frenética mientras estamos en lo que se podría denominar un coma inducido por nosotros mismos.

Y es que en el fondo huimos de ser Cenicienta, pero en esa huida acabamos siempre perdiendo el zapato y "Pantoffe" quizás logre darnos caza… supongo que por eso me gustan tanto los zapatos que van atados.